El primer día de la nueva jefatura de la Chief of Police Yasmine Sanders y el Captain II Andrew Kay deja un sabor amargo en la boca de los ciudadanos de Los Santos. Apenas habían tomado posesión de sus cargos cuando la ciudad se vio sumida en un ambiente de inseguridad, decisiones cuestionables y un despliegue policial que, lejos de inspirar confianza, ha generado temor y enojo.
Falta de transparencia
Lo primero que llama la atención en esta nueva gestión es la falta de transparencia en la identificación de los agentes. Ayer fuimos testigos de algo insólito: agentes del LSPD patrullando sin número de placa visible, o peor aún, utilizando números de placa que cambian frecuentemente, dificultando cualquier intento ciudadano de registrar o denunciar actuaciones indebidas.
¿Cómo es posible que se tolere semejante práctica en una institución que debería garantizar la rendición de cuentas?
Uso excesivo de recursos
El caso más grave se vivió esta misma noche, cuando ocho agentes del LSPD rodearon un vehículo y revisaron ilegalmente el maletero, sin orden judicial ni justificación aparente. Esta información no ha sido verificada por el Weazel News, proviene de una denuncia ciudadana.
Alerta máxima y aumento del crimen
Por si fuera poco, en este primer día de gestión de Sanders y Kay, la institución declaró el nivel DEFCON 3. Según datos internos, ha habido un aumentaron los delitos violentos en las últimas 12 horas. Hay quienes afirman que las denuncias por robos se han triplicado desde el amanecer.
¿Coincidencia? ¿O estamos ante los primeros síntomas de una gestión torpe y peligrosa?
La ciudadanía observa con creciente preocupación. ¿Qué tipo de estrategia es esta, donde los agentes operan sin identificación estable y se activan niveles de alerta propios de tiempos de alta amenaza a la seguridad?
Comunicado del LSPD
A continuación, reproducimos el comunicado oficial enviado por el LSPD en respuesta a las críticas.
Comunicado del LSPD:
“Debido a la marcha de los antiguos agentes del LSPD, hemos requerido un rápido despliegue de nuevos agentes a los que se les ha dado un número de placa provisional. No se ha reportado ninguna situación en la que haya habido problemas con el número de placa.
Los protocolos para la adaptación y despliegue del personal recién admitido, si bien es de carácter interno y confidencial, podemos comunicar que se trata de un conjunto finito de acciones bien probadas y cuya finalidad es la rápida integración y capacitación material y de conocimiento de los nuevos agentes. Ningún agente se quedará atrás. De hecho, el LSSD ya ha reportado su satisfacción y rápida afinidad con los nuevos agentes, avalando su gestión en los incidentes del día de hoy.
Respecto a lo ocurrido hoy, comprendemos que algunos ciudadanos pueden estar molestos y entendemos que lo fácil es trasladar los problemas personales de cada uno a la policía. Cualquier ciudadano puede denunciar por los canales correspondientes cualquier actuación que crean indebida. El sistema establecido es un sistema garantista y totalmente objetivo. Se evaluarán todas las variables. Solo esperamos que sean coherentes con, no sólo lo que dicen, sino con sus acciones. Desde el LSPD avalamos todas las intervenciones acontecidas en el día de hoy.”
Conclusión
Las palabras del comunicado contrastan con la realidad en las calles: agentes sin placa, dificultad para denunciar abusos y un clima de inseguridad creciente.
Si este es el comienzo de la era Sanders–Kay, Los Santos deberá prepararse para una etapa marcada por la polémica. ¿Cambiara la situacion?